CONTENIDOS

1. Recordamos

2. Presentaciones del tema

3. El reinado de los Reyes Católicos. La construcción de la monarquía autoritaria.

4. Carlos I. La construcción de un imperio.

5. Felipe II.

5. Conquista, colonización y organización de América.

6. ·Economía, sociedad y vida cotidiana

1. RECORDAMOS

2. PRESENTACIONES

2. EL REINADO DE LOS REYES CATÓLICOS. LA CONSTRUCCIÓN DE LA MONARQUÍA AUTORITARIA

a. El mapa de la unión dinástica. Antes y después. Identificamos territorios.

b. La política de l0s Reyes Católicos. La construcción de la monarquía autoritaria.

c. Razona:

- ¿Qué idea subyace a todas las acciones de los Reyes Católicos?

- ¿Castilla y Aragón se unieron realmente en un solo reino?

**El reforzamiento del poder real: Pragmática de los Reyes Católicos sobre la unificación del poder real (1492)**

“Don Fernando y Doña Isabel, por la gracia de Dios, Reyes de Castilla, de León, de Aragón, de Sicilia, de Granada, etc., a todos los concejos, justicias y gobernadores de nuestros reinos, salud y gracia.
Por cuanto es nuestra voluntad que en todos nuestros dominios se mantenga la paz y el orden debido, decretamos que ninguna villa ni concejo podrá tener ejército propio ni tomar justicia por su mano sin la expresa licencia de la Corona. Asimismo, ordenamos que todos los corregidores enviados por Nos tengan plenos poderes para gobernar en nuestro nombre, y que ningún noble ni clérigo podrá oponerse a sus disposiciones.
Mandamos también que en todos nuestros territorios se apliquen las mismas leyes y tributos según lo dispuesto por la Corona, y que toda moneda acuñada lleve nuestro sello real. A tal fin, se prohíbe la emisión de moneda local sin nuestra aprobación.
Por la presente, ordenamos que esta pragmática sea observada y respetada en todos nuestros reinos, y que cualquier infracción sea castigada conforme a la justicia regia. Dada en Granada, en el año del Señor de 1492.”

Encuentra:

Pruebas de centralización de poder.

Pruebas de unificación territorial y legal.

Pruebas de control económico.

d. "Leo, pienso, me pregunto": Auto de Fe de la Inquisición

El auto de fe era un acto público organizado por la Inquisición en el que los condenados por el tribunal abjuraban de sus pecados y mostraban su arrepentimiento —lo que hacía posible su reconciliación con la Iglesia católica— para que sirvieran de lección a todos los fieles que se habían congregado en la plaza pública o en la iglesia donde se celebraba.

El primer auto de fe de la Inquisición española tuvo lugar en Sevilla el 6 de febrero de 1481. En los primeros tiempos eran actos sobrios y austeros. "El público casi no asistía a los autos; en lugar de un elaborado ceremonial, había poco más que un simple rito religioso en el que se determinaban las penas para los herejes detenidos. La ceremonia ni siquiera se celebraba necesariamente en un día festivo, prueba de que no se contaba con la asistencia del público".

El primer auto de fe celebrado en Toledo el domingo 12 de febrero de 1486, en el que se dice que 750 judeoconversos reconciliados salieron en procesión de la Iglesia de San Pedro Mártir. "Con el gran frío que hacía, y la deshonra y mengua que recebían por la gran gente que los mirava, porque vino mucha gente de las comarcas a los mirar, y van dando muy grandes alaridos, y llorando algunos se mesavan; créense más por la desonra que recebían que no por la ofensa que a Dios hicieron". Cuando la procesión llegó a la "iglesia mayor" en la puerta "estavan dos capellanes, los quales fazían la señal de la cruz a cada uno en la frente, diziendo estas palabras: «Recibe la señal de la cruz, la qual negaste e mal engañado perdiste»". Dentro de la iglesia, "donde les dixeron misa y les predicaron", fueron llamados uno por uno leyéndose a continuación "todas las cosas en que avía judayzado". "E de que esto fue acabado, allí públicamente les dieron la penitencia".

En 1504 se celebró en Córdoba uno de los más importantes autos de fe de la Inquisición. Tras pasar por el tribunal cientos de casos, fueron quemadas vivas 107 personas, hombres y mujeres, posiblemente el mayor auto de fe que nunca hubo.

A lo largo del siglo XVI, los autos de fe fueron ganando en solemnidad y duración.

Dos de los actos de fe más célebres por su solemnidad fueron celebrados en la Plaza Mayor de Valladolid los días 21 de mayo y 8 de octubre de 1559. En el primero de los dos fueron quemadas catorce personas y los huesos y estatua de otra más, y se reconciliaron dieciséis con penitencia. En el segundo, se quemaron trece personas y los huesos de otra, y hubo también otros dieciséis penitenciados. Seguramente estos dos actos históricos inspiraron a Miguel Delibes el descrito en su novela El hereje.

Los autos de fe de 1559 celebrados en Valladolid y en Sevilla para eliminar los focos protestantes que habían surgido en esas dos ciudades, sirvieron de modelo para los posteriores

Estos procesos y persecuciones contra herejes o miembros de otras religiones se dieron por toda Europa, y fueron, siempre, un instrumento político.